Vividor en el sentido de vivir intensamente la vida, de disfrutar cada instante de todo lo que nos brinda, mirando siempre el lado amable, lo positivo, lo sano, lo verdadero y lo que realmente merece la pena.
Conservo muchos amigos, a casi todos los compañeros del colegio, a clientes y proveedores convertidos en amigos, a cuadrillas y grupos de viaje de muy diferente procedencia. No así (cosa verdaderamente extraña), de la universidad y de la mili. Si amigos, hice la mili, campamento en Córdoba y Estado Mayor en Capitanía General de Sevilla.
Una de mis grandes pasiones ha sido siempre viajar y he tenido la inmensa fortuna a lo largo de los años de conocer países, gentes y lugares maravillosos. Paisaje, arte, gastronomía, arquitectura, cultura y tradiciones.
Mis próximos destinos son el lago Baikal en Siberia y la Laponia finlandesa.
Me encanta mi trabajo. He trabajado en cine de largometraje, en teatro musical, en televisión, en programación cultural, rodando contenido para museos maravillosos y sobre todo, mucha publicidad. Empecé haciendo fotografía y sigo desarrollándome en ella con verdadera entrega.
No podría vivir sin música, sin muchas series y películas, sin la radio, sin ir al teatro y sin mi coche, que me da mucha independencia. El deporte y los idiomas son desde hace tiempo mis asignaturas pendientes. Y debería leer más. Sobre todo libros.
Soy un gran coleccionista. Colecciono efectos militares, antigüedades, vinilos, libros, juguetes y todo tipo de cachivaches. Temo contraer de forma súbita el síndrome de Diógenes.
Nunca me he montado en una montaña rusa, odio el huevo duro, soy paciente menos con los atascos, las colas absurdas y la gente estúpida.
Debería beber más agua, pero me encanta la cerveza, el vino, blanco y tinto, el ron, la ginebra y el whisky de malta, la manzanilla de Sanlúcar, el brandy de Jerez, el champán, el calvados, el vino de Oporto y sobre todo, el pisco sour.
No pararía nunca de comer jamón ibérico de bellota, gambas rojas de Denia, una buena burratta y foie del bueno. Me vuelve loco una barbacoa con amigos y largas conversaciones después. Una buena chimenea me resulta imprescindible. Un fin de semana en una casa rural me resulta plan diez y si es mirando al mar, insuperable.
Prefiero chalet a piso, no me gustan las mascotas, quiero pensar que soy generoso y me considero de mentalidad liberal, política e ideológicamente. Odio la hiper regulación de todas las cosas en la vida.
No enfermo casi nunca, gracias a Dios. Será porque soy empresario autónomo, aunque cada otoño sufro tremendos ataques de alergia. Nunca me han operado de nada.
Tengo una madre, cuatro hermanos y tres hijos.
No me gusta el fútbol. Sí el tenis y el baloncesto.
Me considero una persona vital, apasionada, responsable, positiva, emocional, joven a pesar de la edad, nada rencorosa ni envidiosa, privilegiada y muy afortunada, sobre todo viendo lo que sucede a mi alrededor. Dicen mis buenos amigos que soy divertido. Lo que puedan decir mis enemigos lo desconozco, porque no tengo constancia real de ninguno en esa categoría.
A veces soy un poco inconsciente, inmaduro e infantil y pienso seguir siéndolo (a veces).
Tengo muy claras las cosas que son importantes para mí en la vida y las que son accesorias.
Tengo carnet de conducir, acreditación de prensa, tres tarjetas de crédito, permiso de armas, licencia de patrón de embarcación de recreo PER, carnet de Makro, Ikea, Iberia plus, El Corte Inglés y Costco. Soy el socio capicúa número 8778 de la Asociación de Antiguos Alumnos del Colegio del Pilar.
Escucho Ondacero y RNE 3, que es donde vive la música.
Soy socio hace años de la Cruz Roja y de Aldeas Infantiles.
También soy crítico, irónico, analítico, algo exigente y no soporto a los insolentes, a los violentos, a los falsos y cínicos, a los que abusan, a los que presionan para obtener ventaja, a los maleducados, a los soberbios, a los incívicos, a los maltratadores, a los funcionarios y a los no funcionarios que no atienden a la lógica de las cosas, a los que no respetan, a los que no escuchan y en general a la gente que no es de fiar.
Reseñas del capítulo:
"Lamentablemente ésta es la historia misma de la Humanidad, una his¬toria hecha de guerras, conquistas, dominación, muerte y destrucción. Por fortuna, de vez en cuando hacemos también cosas útiles y hasta bonitas, en música, arquitectura, ciencia, pintura y otras muchas disciplinas. Hemos hecho buenas películas, grandes óperas, literatura encendida, ensayos y novelas, edificios, puentes, barcos y aviones, veloces trenes y esculturas imposibles. Hasta de vez en cuando surge un poeta que vale la pena."
"Tienes que comprometerte, me dicen, no puedes ser imparcial, tienes que tomar partido, lo que haces es muy cómodo, la Sociedad, la Huma¬nidad necesita del compromiso de todos; y yo no dejo de decir que estoy de acuerdo, que debemos caminar todos juntos, toda la Humanidad pero hacia un objetivo, hacia un horizonte de igualdad verdadera, desde luego alejada de extremismos."
"¿Y saben qué les digo?, que a veces me da por pensar lo acertado que estaba el actor estadounidense W. C. Fields en los años 40 cuando decía: «Estoy libre de todo prejuicio, odio a todo el mundo por igual». Nadie más demócrata que él."
"En el fondo se trata de una cuestión de TOLERANCIA, uno de los grandes valores que creo tenemos (o buscamos tener) personas que intenta¬mos mantener el equilibrio en las cosas, en las relaciones y en las opiniones,en todos los aspectos de la vida. Es como la Naturaleza misma, a veces violenta, a veces calmada, la mayoría de las veces estable y perdurable a lo largo de los siglos pero a la vez en constante evolución."
"Hablando de valores, a veces me pregunto cuál es verdaderamente el valor supremo y si realmente LA VIDA lo representa. Y me refiero a la vida en su sentido biológico, no en un sentido sociológico, de vivir mejor o peor, con más o menos lujo, con más o menos felicidad, bienes materia¬les o elementos que de una forma genérica hacen que el paso de los días suponga placer o satisfacción, sino a la vida en relación con la muerte, ambas caras de una misma moneda."
"La vida se la debemos a la naturaleza, al destino, al Big Bang, a la evolución, a Dios, a Alá o a Buda. Precisamente es éste último el que se muestra más generoso en lo terrenal, ofreciéndonos la reencarnación, es decir, poder vivir muchas veces seguidas, hasta el infinito; lo malo es si alguna de esas veces te toca reencarnarte en un cangrejo cacerola o en algún humano indeseable, peor del que habías sido hasta ese momento. Siempre hay que intentar mejorar cada día, ser mejores personas, en lo personal y en lo profesional."
"Fueron unos años maravillosos en los que todo era nuevo, una época de descubrimientos y también de formación de las ideas, de dar rienda suelta a sueños e ilusiones, aunque muchas veces se quedasen en eso, en sólo sueños."
"Películas casi todas que tratan sobre principios como el honor, el valor, la entrega, la honestidad, la nobleza, el coraje, la ética, el esfuerzo, la supe¬ración, la fortaleza, la generosidad y la idealización del ser humano.
El que no me crea que las vea. Es un consejo de amigo. Cine puro.
Los Pecados Capitales son otra cosa, quizás estén un poco desfasados. Lujuria, Pereza, Gula, Ira, Envidia, Avaricia, Soberbia. ¿Quién podría decir –sinceramente– que no ha caído en la tentación de cometer alguno de estos pecados en numerosas ocasiones...? ¿Ni siquiera la Gula...? ¿Ni siquiera la Ira...?"
"En situaciones de guerra, de excepción, de tensión y angustia, de extrema necesidad, actuamos de manera diferente a la que lo hacemos en condiciones normales. Cuando la cosa aprieta somos más valientes, más solidarios, más generosos, menos racistas y clasistas, más leales y sinceros, más espontáneos, más respetuosos, más humanos, más comprensivos,res-ponsables, compasivos, honestos, comprometidos, etc."
"Es muy importante que seamos buenas personas cada día, todos los días, con todas las personas y en todas las circunstancias. No se trata de ejercer un buenismo filosófico, indiscriminado y generalista. Nuestro Señor Jesucristo nos dijo que fuéramos hermanos, no «primos». Y ¿por qué?, porque no es algo que todas las personas que nos rodean hagan, y por lo tanto no jugamos en igualdad de condiciones, todos con la misma baraja y con las mismas reglas."
"Por la otra parte y a modo de ejemplo, el «tristemente necesario» lan¬zamiento de las bombas nucleares (Little Boyy FatMan) sobre Hiroshima y Nagasaki daría pie a un largo debate que dejo aquí, encima de la página, al igual que la guerra de Vietnam. ¿Henry Kissinger premio Nobel «DE LA PAZ»? Estados Unidos en entredicho. Muchas veces, demasiadas veces. En todas partes cuecen habas. A veces hasta con napalm."
"Y qué decir de las dictaduras. La Argentina de Videla, por ejemplo y la de Pinochet en Chile. Siempre me llamó la atención y me intrigó la imagen de estos generales bajo palio y comulgando muy recatados de la mano de una Iglesia católica ciega y cómplice.
La de los Castro en Cuba, que pasó de revolución a dictadura heredi¬taria, al igual que la de Corea del Norte, una payasada también hereditaria que daría mucha risa si no fuera porque da mucho miedo."
"Pienso y he defendido en numerosos grupos de amigos y no tan amigos que una revolución es un concepto dinámico, puntual, una catarsis, un golpe en un momento dado de la historia, único e irrepetible, nunca algo estático, que se prolongue en el tiempo durante cincuenta años. ¡Señores!, eso NO es una revolución, es una institución, un régimen, otro régimen igual o peor que el anterior."
"Ser perfecto es algo metafísicamente imposible. Para los católicos creyentes ni siquiera lo somos (perfectos) en el momento de nacer, en el momento de la máxima inocencia, porque nacemos bajo el signo del Pecado Original con el que ninguno de nosotros tuvo nada que ver y que desaparece en el momento del Bautismo. El ser humano nace y crece con¬taminado por un montón de circunstancias que le empujan a pecar, a errar, a meter la pata, a defraudar. Recordemos el dicho de «En esta vida, todo lo bueno es ilegal, inmoral o engorda»."
"No hablemos de la salud, de la que siempre nos olvidamos hasta que nos falta. Esta sociedad en la que vivimos y la mentalidad de las personas humanas que la habitamos tiende a dar por hecho muchas cosas que después lamentamos haber perdido, muchas veces porque no nos las hemos ganado, no las merecemos, nunca hemos luchado por ellas o sencillamente no estamos acostumbrados a perderlas."
"En ese sentido, siempre me sorprendió la gente que dice que no se arrepiente de nada de lo que ha hecho a lo largo de su vida. Es algo muy común y no sé si se hace como una gracia o como símbolo de poder y de estatus. Me parece de una soberbia infinita perseverar en el error con tal de no reconocer que te has equivocado y, consecuentemente, pedir perdón y tratar de reparar el mal causado."
"Y lo digo porque la vida es algo prestado. Y porque nada dura eterna¬mente, ni siquiera la vida misma o principalmente la misma vida."
"Como decía Fellini: «E la Nave va»."
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